30 de diciembre de 2014

Proyecto a finales de año

Por primera vez en muchas navidades, Papá Noel está de acuerdo conmigo en que he sido bastante buena los últimos doce meses, y me ha traído un portátil nuevo. 
Después de pasar semanas apañándomelas en internet a través del móvil, acelerando así el proceso natural de mi futura presbicia (vista cansada - por si me lee alguien de la ESO - o que pronto voy a necesitar gafas para ver de cerca - por si me lee alguna víctima de reformas educativas posteriores), aquí estoy, teclea que te teclea toda feliz.
Pensaréis que ahora que he conseguido lo que quería, volveré a hacer y decir las maldades de siempre. Pues nada más lejos de la realidad. Tampoco voy a cambiar de la noche a la mañana, pero sí he comenzado un proyecto la mar de bonito (o eso me han dicho) que espero que tenga futuro.
He creado otro blog, Bondad Anónima, en el que iré recopilando historias de gestos de amabilidad y generosidad llevados a cabo casi siempre de forma espontánea, desinteresada y entre desconocidos. Además de la iniciativa propia de cada individuo, en varios países existen campañas y organizaciones que promueven y  fomentan estos actos, y yo quisiera saber si quienes me leéis habéis tenido una experencia de este tipo o si conocéis el caso de alguien que haya recibido una sorpresa agradable por parte de un desconocido. De ser así, me gustaría que me enviáseis un correo utilizando el formulario de la barra lateral derecha, y yo lo publicaré en el blog y en Twitter, para mostrar y demostrar al mundo que "all you need is love", que un detalle sencillo puede alegrar el día o la vida entera de otra persona y quizás también para animarnos entre todos a portarnos mejor con nuestros prójimos y "prójimas". ;) 


No hay comentarios:

Publicar un comentario